Consecuencias pos-fiesta

Todo comenzó cuando un chico borracho me dijo las cosas más bonitas que un hombre me haya dicho en la vida.

Un chico que le gusta a una amiga, una amiga que me ha pedido que no haga nada con él.

Un chico que no sé cuando volveré a ver.

Un chico... que me ha dejado prendada.

No se si esto quedará aquí, si le volveré a ver, si perderé a mi amiga...

Solo quiero que pase lo que tenga que pasar, y que pase ya, porque esto me está matando.

Infinito

Si hay algo que he aprendido de las matemáticas es el concepto de infinito.
La real academia de la lengua española, define infinito como aquello que no puede tener fin ni término. Puede entenderse como siempre en terminología temporal.

Yo creía estar de acuerdo con ello hasta que nos enseñó los diferentes casos en los que puede aparecer infinito y, dependiendo del caso, infinito se puede transformar en cero, en nada.

Ahora es cuando entiendo las cosas que me pasan, cuando alguien me promete que estará ahí siempre y en realidad desaparece dándome una puñalada sin aviso.

En este momento me he quedado sola, en la nada, en el cero que supone un infinito que tendía a ello.

Creo que a partir de ahora aprenderé a tener más cuidado con las promesas, ya que parece que la inmensa e infinita mayoría son falsas (o eso o se les da muy bien utilizar el infinito a su antojo).

Bienvenido

Siempre he considerado que mi vida no es asunto de nadie pero, por qué no contársela a extraños que ni siquiera me conocen?
Igual alguien hasta se siente identificado con la vida de una estudiante de instituto que yo considero rara, única.

Bueno, me presento, me llamo... bueno, llamémosme Miss Stinson (sí, por Barney Stinson, soy una auténtica fan), no vaya a ser.
Tengo 16 años y cumpliré 17 en mayo.
Soy una adolescente fuera de lo común. No bebo, no fumo, no me gustan las discotecas, odio la música esta que suena ahora (soy más de Nirvana, Scorpions, 78violet, Simple Plan...) , me flipa el fútbol (aunque solo cuando juega Messi, lo siento madridistas), prefiero noches de manta y sofá a salir de fiesta, odio la ropa ajustada (siempre llevo sudaderas) y, como supongo que muchos, no encuentro mi sitio en este mundo de locos.

Sí, soy rara, lo admito.
No encajo con las chicas de ahora y eso hace que siempre tenga problemas a la hora de hacer amigos.
No he tenido mi primer beso, Disney me convenció para que esperara al Príncipe Azul y se está haciendo de rogar. Y eso también me lleva a tener problemas a la hora de tratar con chicos.
No es que nunca haya tenido pretendientes (algunos han sido realmente un acoso permanente) es que cuando se enteran de mi completa virginidad simpre pasa una de estas cosas:
        
          1- Se extrañan, me miran raro, dicen: "¿En serio?", asiento, vuelven a mirarme raro y se                van (creo que se piensan que es porque tengo algo raro).
        2- Se obsesionan en "dejar de que sea así".


Y bueno, así ha sido siempre y creo que nunca he tenido un amigo de verdad, nunca encajo.
(Bueno, sí, tengo una amiga verdadera, mi hermana, en realidad es mi prima, pero vive a 550km, así que no tengo a nadie cerca, solo por teléfono).

Por lo tanto estoy relativamente sola, buscando mi lugar en una ciudad... llena de... llamémosles personas para entendernos, que no me comprenden.
Y bueno, dentro de mi aburrimiento por no tener planes en el puente de Carnaval, he decidido contar a algún interesado cómo me las apaño para, después de levntarme por la mañana, sobrevivir y volver a la cama sin demasiados desperfectos.

Así que, espero que alguien, leyendo esto, sienta que no es el único con problemas en este mundo.